La moda vuelve a dar un giro inesperado. Las clásicas ojotas, símbolo de la comodidad y el relax veraniego, comienzan a ceder su protagonismo frente a un nuevo favorito de las pasarelas europeas: las sandalias deportivas. Este calzado, que combina estilo, confort y practicidad, se impone como la gran tendencia para la próxima temporada de primavera-verano 2025/2026.
Diseñadores de toda Europa las incorporaron en sus colecciones recientes, marcando una transición hacia una moda más funcional, que busca equilibrio entre el bienestar y la estética. Las sandalias deportivas dejan atrás la informalidad de las ojotas, pero mantienen su espíritu liviano y fresco, con un diseño versátil que se adapta a distintos estilos.
El auge de las sandalias deportivas
Con su punta redonda, talón abierto y cintas que abrazan el empeine, las sandalias deportivas se convirtieron en el punto medio entre lo urbano y lo casual. Son ideales tanto para caminar por la ciudad como para acompañar un look relajado de fin de semana.
Entre sus principales características destacan:
Plantilla acolchada, que mejora la amortiguación y el confort.
Materiales lavables, resistentes al uso y al lavado en lavarropas.
Suela de goma antideslizante, con alta tracción.
Punta ancha y redonda, que aporta frescura.
Diseño ergonómico, que distribuye el peso de manera uniforme.
Esta combinación de confort técnico y diseño minimalista explica por qué las grandes marcas europeas ya las posicionan como el calzado imprescindible del próximo verano.
Cómo combinarlas esta temporada
Las sandalias deportivas se adaptan con facilidad a múltiples estilos. Son una opción fresca, moderna y, sobre todo, práctica. Los estilistas recomiendan combinarlas con:
Joggers o pantalones cargo, especialmente en telas livianas y cortes modernos.
Remeras oversize o crop tops, preferentemente con estampados llamativos.
Shorts deportivos para un look más suelto y urbano.
Camisas holgadas, ideales para salidas informales o eventos de día.
Accesorios como gorras y riñoneras, que refuerzan su espíritu canchero y despreocupado.